Después de la sentencia de la Unión Europea, el derecho al olvido es una realidad. Cualquier ciudadano puede solicitar el borrado de algunas páginas, e incluso hay servicios especializados para ello. Pero a medida que las webs empiezan a desaparecer sale a la luz otra consecuencia de todo esto: la censura "de facto" de algunos medios.
desde http://ift.tt/1xp2eIY
desde http://ift.tt/1xp2eIY
No hay comentarios:
Publicar un comentario